FEDERICO CHUECA

Federico Chueca nació en Madrid, en la Torre de los Lujanes, el 5 de Mayo de 1846. 

Aunque desde pequeño había demostrado un gran talento musical, su familia le obligó a dejar su pasión para dedicarse a estudiar medicina. 

Pero eso no acabó con su carrera, ya que gracias al don casi innato que tenía para la música, siguió componiendo y dejó la medicina.  

Falleció el 20 de Junio de 1908. La asociación cultural la Bagatella y su viuda, Teresa Marín, colaboraron a la creación de un mausoleo en el Cementerio de San Justo. 

LA

SEPULTURA

Un año después de su muerte, se descubrió el mausoleo para el maestro que había sido sufragado por la asociación La Bagatela gracias a una función homenaje al maestro en el Teatro de la Zarzuela y por su viuda, Teresa Marín. 

El proyecto fue realizado por el arquitecto José Grases y la ejecución corrió de la mano y cincel de Pedro Estany, escultor y catedrático de la Escuela de Artes y Oficios. 

La descripción en el periódico del mausoleo fue así:

“Bajo un busto de Chueca adósase la tumba, adornada de hermosas flores y cruzada por un pentagrama, en el que aparecen, reproducidas de un autógrafo del autor, las notas de la Marcha de Cádiz en su frase “¡Viva España!” Y cuya cinta pautada figura salir del interior del túmulo. 

Un chispero, representación genuina del pueblo, expresado en su rostro el dolor, sinéntase en un extremo, cubriendo parte de la losa con la bandera nacional. Una flama de bronce figura lucir al extremo opuesto. 

En la parte posterior de la obra aparecen los nombre de las más conocidas de Chueca. El busto es de mármol de Carrara y el resto del monumento de piedra de Almorquí.» 

100 AÑOS MÁS TARDE…

El paso del tiempo, la calidad de los materiales usados en la época y la falta de cuidado ha hecho que el estado actual de este magnífico mausoleo sea ruinoso. A penas se distingue entre el musgo los grabados, el chispero ha perdido la cabeza y la piedra se desprende y deshace con rozarla.

PROYECTO AZUCARILLOS

Como amantes incondicionales del arte funerario, en la asociación FunerArte hemos decidido liarnos la manta a la cabeza y embarcarnos en el Proyecto Azucarillos, a través del cual queremos restaurar el mausoleo de Federico Chueca en el Cementerio Sacramental de San Justo y devolverle el honor y esplendor que se merece la obra de Grases y Estany.

Para ello contamos con la inestimable ayuda, inspiración y saber hacer de Roberto Manzano, escultor afincado en Almería y que ha aceptado entusiasmado participar en el proyecto, así como el propio Cementerio Sacramental de San Justo y la Real Sociedad Económica Matritense de Amigos del País, institución cuya sede está precisamente en la Torre de los Lujanes.

¡TE ESPERAMOS!